Colonias 2015, Día 2
Nos despertamos tras la primera noche en nuestra casa hermandad a las 8:30 y desayunamos unas ricas tostadas que nuestros amigos de cocina nos preparan con mucho cariño. Después de lavarnos los dientes nos espera el autobús con destino a la playa de Matalascañas. Una vez allí nos dimos un baño refrescante para combatir el calor, nos divertimos haciendo castillos de arena y jugando a enterrarnos.
Además de los baños nos ayudó a refrescarnos el melón de nuestro pueblo. Al volver nos esperaba una ensalada con productos frescos de la huerta palaciega y unas deliciosas patatas fritas con albóndigas y de postre sandía. Cuando terminamos de comer, hicimos una manualidad con arcilla con tan mala suerte que al dejarlos al sol, se han resquebrajado (¡aquí también pasamos calor!). Nos dimos un manguerazo para limpiarnos toda la arcilla y retomar, más tarde, las manualidades: decoración de bolígrafos y caretas.
Y después de una sabrosa merienda, pasamos a los deportes: torneo de fútbol. Tras esta animada tarde, llamamos a casa para contar cómo lo estamos pasando: nuestras penas y alegrías. Una ducha ligera y al comedor. Nos esperaba una deliciosa cena: sopa de fideos y chacinas variadas, de postre una exquisita natilla.
Se nos hizo un poco tarde, reparto de camisetas para lucirlas mañana en nuestra visita al Parque Nacional del Coto de Doñana. Después de felicitar a todos nuestros niños por su extraordinario comportamiento en la playa de Matalascañas, rezamos tres Ave María y nos marchamos a la cama.
